martes, 14 de diciembre de 2010

Un cuento de "terror"

Algo parecido a un cuento.

Un interesante aviso en el periódico anunciaba el trabajo.”Se solicita personal joven para trabajar en campaña navideña”. Era la oportunidad perfecta para aprender. El anuncio no hablaba de que clase de trabajo, ni requisitos, sólo presentarse en aquella calle de Aviación. Emprendió un viaje hacia aquella dirección, encontró la oficina y tocó el timbre.

-Buenas tardes, vengo por lo del anuncio – afirmó a la voz que provenía del intercomunicador.

-Oh, claro, en estos momentos no podemos atenderlo, el horario ha sido cambiado por un imprevisto. Pase a las 4 de nuevo-respondió la voz.

-No hay problema señorita, vuelvo en una hora-respondió, de buen modo, guardándose la ira que le producía perder tiempo.

La impaciencia lo invadía, necesitaba realizar alguna actividad. Fue a una juguería cercana a beber un jugo de naranja. El tiempo no ayudaba, solo quince minutos había pasado. Sacó su celular e hizo algunas llamadas. Terminó escuchando música en su reproductor portátil.

Era momento de retornar a la oficina. Sin embargo, ahora se encontraban una vasta cantidad de gente, con cara de encontrarse confundida y disgustada. La voz del intercomunicador se presento dando a conocer su nombre.

-Buenas tardes, soy Lourdes, disculpen la molestia-anunció. Mientras pronunciaba estas palabras, algunos se quejaban; otros, sumidos en su necesidad, esperaban impacientes a ingresar.

Unas escaleras lo conducían a lo que parecía un aula de colegio, algo pequeña, donde una pizarra se hacia notar. La mirada de él y los presentes la observaron anodados.Nadie entendía que clase de trabajo era; sin embargo, todos entendían los datos infrahumanos y presentes en la pizarra.

-Disculpe, ¿tiene algún conocimiento de en qué consiste el trabajo y si esas cifras son las reales?-Preguntó una joven de tés mestiza al interesado.-Pensaba que era un trabajo de medio tiempo-Dijo mirando a sus amigas, quienes hicieron una afirmación con su cabeza.

En ese momento Lourdes, ahora nerviosa y algo cohibida, observa al grupo y expone los datos de la pizarra. El grupo no lo puede creer. Los datos eran ciertos.

-…Como les comentaba, el trabajo consiste de vendedor durante veinte días. El horario es de diez a diez. Cuentan con una hora de “lunch” al mediodía y media hora de descanso a las seis. El pago es de trescientos cuarenta soles y si tienen hijos, cincuenta soles extra por cada uno- dijo la señorita, ahora confiada en sus palabras y observando la reacción del grupo.

Las miradas de las personas se transformaron en nostalgia, en especial la del joven interesado, quien solo levanto la mano.

-Señorita, este trabajo se aprovecha de la desesperación de la gente. ¿Le parece correcto ofrecernos este puesto, a gente que probablemente estudie o que tenga familia? Algunas de las personas presentes probablemente vienen de lejos, o han sacrificado otras oportunidades para acercarse aquí. Con la necesidad de un trabajo justo, que le permita mantenerse en una calidad de vida aceptable.-dijo indignado el interesado.

Las personas no mostraban alguna acción, sus miradas solo se posaban en el joven que había hablado. La mirada de Lourdes nuevamente se mostraba nerviosa. Simplemente no tenia palabras, no estaba preparada para una reacción asi.En ese instante, Lourdes dijo algo inesperado.

-B…Bueno...También tenemos puestos fijos para el siguiente mes, medio tiempo, el pago es un poco más y es por tres meses. Es en el área de almacén-dijo Lourdes, sintiéndose incapaz de poder controlar la situación. Definitivamente no estaba capacitada para aquella charla.

Algunos se pronunciaron, se retiraron y otros, como el interesado, solo observaban y pensaban. Él logró su objetivo. Consiguió forzar a la empresa a otorgarle un puesto levemente justo, que no solo él, sino todos los presentes buscaban. La gente estaba bien.

Me veo obligado a mostrar mi insatisfacción por este abuso total. A su vez, siento vergüenza de nuestra condición, que nos obliga a aceptar esta terrible situación a la que hemos llegado. La empresa nacional no funciona, dependemos del capital extranjero y la importación, ya que nos provee de productos y trabajo. La decencia se ha perdido, solo queda la desesperación. Tal vez tenía la opción de seguir buscando otro trabajo veraniego; sin embargo, ellos no. Por ello decidí actuar. Esperaba que me botaran, o que me respondieran de alguna forma inteligente, pero la reacción fue totalmente contraria. Me encontré con un ser humano confundido, con estudios, que sabía expresarse, pero sin respuestas. Incapacitada de demostrar que sabia lo que hacia.

Estas empresas que buscan gente normalmente son agencias que captan personal para luego ser enviados a trabajar en empresas mas grandes, como Ripley o Saga, como recomendados. No tengo conocimiento de si la ganancia es alta; sin embargo, comprendo que la gente enviada puede que no sea capacitada. Ellos solo seleccionan a los que consideran mejores, basándose en su currículo (muchas veces exagerados, como el mío por ejemplo), no importa si son desaquillibrados, eso ya es problema del contratante. Su personal no está capacitado para explicar los trabajos, solo siguen un texto y unas líneas que no ofrecen mayores detalles.

Respecto a las personas que asisten, en su mayoría son personas de estratos medios y bajos, mujeres y estudiantes, que buscan ganar un poco de dinero justamente. Al conversar con ellos, llegué a la conclusión de que buscaban un trabajo de ocho horas o medio tiempo si es posible, ganando sueldo mínimo o menos. No esperaban encontrar un trabajo de doce horas con tan pocas ventajas y con un sueldo tan ínfimo. Muchos dirán que la experiencia es también parte importante del empleo, pero ¿Realmente ser vendedor otorga gran experiencia? Es verdad que da mejor capacidad de relacionarse con otros; sin embargo, considero que con el alto nivel de estrés que produce trabajar doce horas, probablemente solo aprendan cómo amargarse la vida y liberarla con sus seres queridos. El sueldo que ofrecía esta empresa es una patada directa. No se puede vivir con esta cantidad. Tenemos que considerar en ese sueldo los pasajes, el almuerzo, el sandwichito intercomidas,alguna emergencia, u algún otro gasto extra que surja durante la jornada laboral, que prácticamente incluye todo el día. Vale también explicarle a estas empresas que la gente vive, esto lo digo porque el trabajo era de lunes a domingo. Son veinte días de trabajo sin descanso para trescientos cuarenta soles. Probablemente la ganancia final solo sea de cien soles, que a estas personas les servirán para comprarles regalos a sus familiares y amigos en navidad. Han sacrificado tiempo por esto. Estos no cuestionan el trabajo, lo aceptan porque no tienen otra opción. Necesitan un trabajo más justo, que ofrezca mayores oportunidades e incentivos, como premios por aumentar las ventas.

Ahora hablemos del plato fuerte. Las empresas contratantes. Éstas son en su mayoría capitales extranjeros que han visto una buena oportunidad en Perú. Estas nos han ayudado a “aumentar” el PBI y el índice de empleos, pero seamos sinceros. Las empresas no solo han visto una oportunidad para vender, sino una mano de obra desesperada, a la cual pueden explotar. La reconocida empresa Ripley paga a sus empleados en chile un promedio de mil dólares la jornada de ocho horas, sin incluir incentivos ni gratificaciones. El peruano gana seiscientos soles, todo incluido. Es una situación indignante pero cierta.Nisiquiera nombrar otras como Mcdonald, Starbucks,la ex peruana Wong y Metro, entre otras. La mayor parte de personas que entran en estos últimos son estudiantes, que aceptan el sueldo mínimo temporalmente, con el fin de recibir experiencia y algún dinero, sin embargo, hay independientes que se sustentan con este sueldo. La solución no está en retirarlas estas empresas del mercado peruano, y mucho menos nacionalizarlas, sinó en crear un organismo realmente regulador, funcional y totalmente incorruptible que obligue a cumplir una buena labor durante su periodo de actividad y que analice las leyes con el fin de que estas no aprovechen los vacios legales.

Hace poco la telefonía, en el área de internet, sufrió un cambio. Una serie de regularizaciones surgieron con el fin de ofrecer un mejor servicio hacia el público. Estas consistían en establecer multas que redujeran la velocidad de conexión a los usuarios que superaran los límites establecidos de transferencia de datos. La reacción del peruano fue inmediata. Se inició una lucha “virtual” para que se retractaran de aquella acción, haciendo recolección de firmas y mandando cartas al organismo regular, OSIPTEL, quien aún no se había pronunciado.Finalmente, esta regulación fue cancelada a medias, ya que a los usuarios que hayan adquirido el servicio después de julio del 2010 si se les penalizaría. Queda aún por ver qué estrategia usará para terminar aplicando esto a todos sus usuarios, tal como el caso de los contratos, en los que la persona solo estaba obligada a pagar el servicio de telefonía por seis meses y luego podían cambiarse de operadora. Su solución fue obligar al usuario a firmar un contrato por seis meses más.

Así como este,se ven muchas casos más de abusos cometidos por estas pseudo empleadoras progresistas, que a mi parecer hacen más daño que bien. Lo gracioso es que solo podemos aceptarlas permanecer sumisos a sus órdenes, o tal vez podamos darles una buena llamada de atención demostrándoles que también podemos manufacturar nuestro productos y dárselos. Todo depende de nuestra actitud.

martes, 7 de diciembre de 2010

Más juguetes

Juguetes

Cada cierto tiempo no se me ocurre mejor idea que revisar el inmenso arsenal de juguetes que aún conservo en una pecera donde solía tener mis hamsters.Lo increíble es cuando me acuerdo el uso que le di a cada objeto o donde los guardaba. Ahora compruebo la tan anticuada y odiada frase que siempre escuchaba de pequeño: “Al final, el juguete que menos costo tiene es el que más vas a usar”. Y si pues, solo con un muñeco lo comprobé, pues recuerdo los muy buenos momentos que pasé con unos Bionicles armables de McDonald (lamentablemente), en comparación con un Optimus Prime que se transforma en cinco formas, de las cuales dos nunca pude armar, debido a que las piezas desaparecieron el mismo día que lo recibí. No obstante, recuerdo haber deseado ese Optimus con todas mis fuerzas, presionarlo hasta que lo compre. No tengo la menor idea del precio, pero debido al tamaño puedo suponer que era de gran valor.
Ahora tengo juguetes que quizá debería regalar, pero ¿Para qué? Ya he tenido la oportunidad de regalar algunos personalmente; sin embargo, no he observado algún gesto de felicidad, alguna señal de que realmente lo vayan a disfrutar. Tal vez en su cabeza estén pensando que se los van a quitar, que no deben tenerlos o tal vez yo esté exagerando. Ahora solo me queda conservarlos y ,como hoy, limpiarlos y recordar. Al fin, tío Enrique, entiendo porqué también los conservaste.

domingo, 21 de noviembre de 2010

Interesante imagen.

sábado, 20 de noviembre de 2010

Memento homo , quia pulvis es , in pulverem revertis

¿Tanto contenido puede tener una canción?
La trilogía Gaia es una colección de álbumes de mago de oz que narra los eventos importantes de la humanidad, como el descubrimiento y conquista de América, o mitos como el de la ciudad de Atlántida o El Dorado.Gaia III : Atlantia es el álbum final y una canción me llamo la atencion.Atlantia narra el fin de la tierra, causado por el excesivo uso de recursos, que cambiaron el ciclo ecológico su vez, la canción hace referencia a las religiones, aunque debo considerar que hace énfasis en la católica al decir "..Ser gay es una enfermedad, violar a un crio, no...”.Me considero cristiano-católico; sin embargo, me duele saber que mi religión aun no acepta que la homosexualidad es un género, y me hace más infeliz saber que lo propaguen. Alguna vez en mi colegio, un padre hablo sobre la homosexualidad, nombrandola una enfermedad, ahora me hace mierda pensar el por qué nunca le pregunte el motivo de esa conclusion, tal vez mi timidez no me dejo, pero sé que le tome importancia porque aun lo recuerdo. Otra pregunta que me hago ahora es ¿Por qué me enseñaron eso? ¿Cual era la intención de querer hacerme creer aquello? No me gusta para nada el poder que tiene la Iglesia sobre el hombre, a tal punto de alimentar la discriminacion, por que a quien le duela, eso sí es discriminacion. ¿De que sirve hacer obras de caridad, dar una buena imagen a la sociedad o cumplir los mandatos de la Iglesia en general, si estas rompiendo una ley básica que nos dio Jesús, la de amarnos los unos a los otros? Correcto.De nada.
Finalmente debo decir, ¿Soy en verdad cristiano-católico? Yo creo en las enseñanzas de Dios Padre e Hijo, que siempre me conducen hacia el buen camino, mas no creo en el poder de la Iglesia. La Iglesia debería ser una entidad espiritual, un guía que modere nuestras acciones, no nuestro pensar. No necesitamos que nos digan que está mal y que está bien, necesitamos darnos cuenta que es cada acción y sus consecuencias."...si haces esto te vas al infierno...” que vulgar e incoherente esta amenaza. Tal vez la enseñanza halla cambiado, pero esas frases quedaran en mi generación probablemente la pasen a sus hijos. Es tiempo de 'apretar F5' y adaptarnos al terrible mundo globalizado en el que vivimos. Y si la Iglesia desea conservar el poder, que se centre ahora en el consumismo, que es la causa de los nuevos males que aquejan al hombre.

"...si alguien lee esta carta, no olvide que el fin de esta civilización
se debió al egoísmo, codicia e incultura de la raza humana..."

lunes, 1 de noviembre de 2010

No todo es lo que parece

No puedo evitar relacionar películas cómicas con la vida real. Es una sensación increíble cuando encuentras a un personaje no estereotipado que toma una buena decisión, pero que al final (debo decir que por cosas del destino) todo le sale mal de una manera muy absurda. La película a la que me quiero referir es La felicidad de los Katakuris, de Takeshi Miike, una verdadera exquisitez que está destinada al olvido. Esta empieza con un corto exterior a la película, sin ningún fin en especial, o con el fin de alejar al espectador de la extravagancia que está a punto de observar. No entraré en detalles ya que solo es un comentario. Terminado este corto, se narra la historia de una familia, los Katakuris, que decide emprender un negocio de hospedaje en una zona alejada de todo lo que la ciudad puede ofrecer. El negocio no es prospero; sin embargo, empiezan a llegar personalidades bizarras e increíbles que cambiaran el rostro, sentimientos e incluso hogar de la familia. La película es a modo de un musical que realiza una sátira de los musicales americanos y sus series, tales como Power ranger, salidos en un principio de Japón.La mecánica es la de cambios secuenciales poco predecibles en diferentes épocas del año.
Me parecería genial lograr la observación de esta cinta antes de leer lo que sigue; sin embargo no es mi principal objetivo. En el fondo lo que vemos es una familia de moral baja, en la que el jefe de familia, agobiado por sus problemas, busca el modo de sacar adelante a su fallida familia. Debido a que todos los integrantes son portadores de desgracias personales, es una muy buena decisión un negocio familiar, un negocio con un núcleo “estable” y un círculo de confianza. Si analizamos mas a detalle a la familia encontramos gente sin educación, que busca sacar adelante al miembro más pequeño. Gente que es peona de la vida, debido a que sus posibilidades han sido truncadas. Gente que busca el apoyo del gobierno, pero que sabe que no conseguirá lo esperado, como en una secuencia donde una carretera que debería traer progreso conlleva a una crisis. Por último, gente real, sin mayores ambiciones, solo con el sueño de ser felices. Esta es una situación que se observa comúnmente aquí en nuestro país. Nos concentramos en la economía y estabilidad de la moneda, en lugar de la sociedad y la juventud. Al final, la economía es resultado de un buen manejo, que deriva principalmente de la educación y los valores en los que se es formado; sin embargo, el “genial” modelo neoliberalista no nos permite educación. Solo nos da la sensación de poseer riqueza en el país, que sinceramente es algo que nadie necesita ya que al final lo que importa es que se posea aunque sea una parte para vivir dignamente. No buscamos darle un golpe a la pobreza logrando la equidad social, es imposible. Pero en nuestra condición de económicamente estables podemos darle las suficientes oportunidades para que estos progresen. Y no hablo de crear ‘reyes de la papa’, termino racista que odio, sino de personas con conciencia nacional y con defectos. La semana pasada inicie mi propia iniciativa de cambiar la vida de una niña que trabaja junto a su madre en las cercanías de donde vivo. Le regale un libro autodidáctico e hice un pacto de que regresaría la próxima semana y si me demostraban que la niña había aprendido los dos primeros capítulos, les regalaría un combo personal a cada una en Bembos. Tal vez no sea una gran recompensa, pero es lo que está al alcance de mis posibilidades. Veremos qué pasa….

viernes, 22 de octubre de 2010

motor

Recuerdo el día en que quise escribir,hace ya unos cinco años .Era una queja a mi mismo por el daño que le hacía a la tierra, algo quizá infantil, pero importante para mí. Simplemente lo publique en la red social que usaba, porque quería dejar una prueba de que tome conciencia de un acto. No quería que nadie lo leyera, solo buscaba que de alguna forma lo recordara algún día. Ese día llego ayer, cuando decidí eliminar esa cuenta y encontré ese texto, algo exquisito para mí. Sentí una satisfacción al saber que a mis catorce años, había tomado una actitud de preocupación por algo de todos, en una época en la que todo era “quinos, tonos, etc”.Claro que se cortó rápidamente al saber que había abandonado ese proyecto; pero hoy, después de haber labrado las primeras bases de mi identidad socialista, me permito decir que me siento orgulloso de haber tenido una conciencia nacional.
He creado este blog con el mismo fin, continuar con ese inicio anónimo,aunque ahora público,preguntándome lo mismo: ¿Sabes, qué estamos haciendo?